Luego de los eventos de Endgame, el mundo comienza a estabilizarse de a poco. Sam Wilson decidió renunciar al escudo regalado por Steve Rogers, mientras que Bucky intenta sanar su mente haciendo terapia. Pero de golpe sale un grupo terrorista que se siente descontento con la re inserción de los re aparecidos; todo mientras desde el gobierno norteamericano, impulsan a un nuevo Capitán América.
Seamos sinceros, pocos eran los que esperaban con ansias Falcon and The Winter Soldier. Quizás sea porque los protagonistas son en realidad eternos secundarios del Capitán América, o porque ninguno de los actores tiene el suficiente carisma como para haber hecho resaltar a sus personajes en el MCU; y quizás ese nulo hype le terminó jugando a favor a esta serie.
Así como WandaVision trataba a su forma el problema de la salud mental, Falcon and The Winter Soldier nos habla de como tenemos que encontrar nuestro lugar en el mundo. Así es como tenemos a un Sam Wilson que sigue siendo un soldado, pero que al mismo tiempo busca re conectar con su hermana y salvar el negocio familiar; mientras que Bucky intenta dejar sus fantasmas del pasado atrás. Incluso las fuerzas antagonistas (porque distan bastante de ser villanos) tienen el mismo problema: unos viendo como la misma sociedad que prometió ayudarlos los ignora; y otro intentando estar a la altura del manto que debe portar.
El otro punto fuerte de la serie son las escenas de acción. Los guionistas supieron entender que al ser nuestros protagonistas unos soldados, los combates debían ser físicos y “apegados a la realidad” (con las licencias necesarias para ser una serie de Marvel), evitando usar magia o chucherías dignas de otros personajes. Y la verdad es que las coreografías se sienten bastante intensas y bien actuadas; destacando una sobre el tramo final de la serie.
Pero tenemos que hablar de lo malo, y es de la antagonista principal a lo largo de la serie. Sabemos que Karli es una adaptación bastante libre de un personaje de los comics; pero es que su desarrollo es tan disparejo, que pese a que en algún punto su motivación es entendible; a lo largo de la serie se la siente más como una nena caprichosa con poderes con la que no se puede razonar. Esta serie se merecía un mejor “villano” que cargue con el peso de la temporada.
Si debemos mencionar el trabajo de Wyatt Russell, que risas aparte por como le quedaba el casco, el actor hizo un más que sólido trabajo a la hora de encarnar a John Walker. Es una lástima el acoso que debió sufrir por parte de unos virgochos que no pueden separar la ficción de la vida real.
Falcon and The Winter Soldier terminó siendo mejor de lo que muchos esperábamos; y dejó bien parados a dos personajes que habían quedado en una nebulosa, y estableció a nuevos para futuras aventuras. Así se expande un universo.
7.5/10