Si hay un género que a día de hoy casi que ni representa lo que significaba cuando fue creado, es la ciencia ficción. Muchos asocian a dicha vertiente del cine con naves espaciales y grandes explosiones; cuando no lo es. En su génesis, la ciencia ficción retrataba problemáticas actuales y reales de la sociedad, a través de un prisma fantástico, siempre partiendo de la base de que pasaba en un posible mundo futurista donde la ciencia avanzó. Todo este preámbulo es para contarles porque Gattaca, es una película bastante infravalorada.
Esta vez nos vamos al futuro (el futuro de un 1997, año del estreno de Gattaca), donde los seres humanos pueden ser manipulados genéticamente para que nazcan perfectos, sin enfermedades y con los rasgos que queremos. En ese mundo vive Vincent, quien sueña con viajar al espacio. Pero debido a sus limitaciones físicas, no puede, y es por eso que va a idear un complejo plan para cumplir su sueño.
Como verán, todo el palabrerío inicial no fue al pedo; sino que era para presentar una película donde la ciencia ficción no depende de efectos especiales para establecer la palabra FICCIÓN. Solo se sustenta en dos grandes pilares: la trama, y las actuaciones.
Digo la trama porque en esta sociedad, ya no hay extractos sociales como pobreza o millonarios, sino que ahora se dividen por la perfección genética de cada uno. Aquellos que nacieron de forma normal y natural, son condenados a trabajos mal pagos y que nadie quiere, mientras que los que fueron manipulados genéticamente en el útero, tendrán los mejores trabajos o serán deportistas de élite. Y en esa sociedad es donde nuestro protagonista va a romper el molde.
Y las actuaciones, porque se nota que cada uno está dando lo mejor de sí. Si, el papel de Uma Thurman lo podría haber hecho cualquier actriz, pero los de Ethan Hawke y Jude Law no. El primero porque nos debe mostrar la debilidad de su personaje, pero al mismo tiempo como se esfuerza para poder cumplir sus sueños, aun haciendo trampa. Y el segundo, como debe pasar el resto de su vida frustrado, pesé al haber nacido con todas las ventajas posibles, pero que, por los azares de la vida, no lo pude hacer. Buena dupla, buenas actuaciones y buenas motivaciones.
En conclusión, Gattaca es una película que a día de hoy pocos la vieron y la considero bastante infravalorada para lo que propone, y para sus valores técnicos. Así que, si no la vieron, es una recomendación ideal para este fin de semana.
8.5/10