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Review: Crímenes del futuro

Si hay un director que al ver una de sus obras, podemos identificarlo como el responsable sin la necesidad de haber tenido el dato previamente, es David Cronenberg. Y viendo su edad, su carrera y el talento que tiene, cada nuevo proyecto que realiza, es un evento para aquellos cinéfilos de alma que adoramos tanto su cine. Por eso el inmenso hype que había con Crímenes del futuro; así que sin más cháchara, empecemos.

La trama nos sitúa en un futuro distópico, donde el sangrado o las infecciones ya no existen. En este lugar, hay un hombre que puede desarrollar nuevos órganos, que luego dona para que sean conservados por la ciencia. Es ahí cuando comienza un debate moral entre algunas personas, al pensar que se está cambiando el orden natural de las cosas.

Si no conocen el concepto de body horror, les contamos que se da en aquellas películas donde el cuerpo humano sufre un cambio físico grotesco, muy al estilo gore oriental, por ejemplo. Y esto es algo que Cronenberg aplicó en gran parte de su filmografía como el remake de La Mosca o Scanners. En Crímenes del futuro, hay un poco de eso, pero mezclado con el erotismo que el director también suele darle a sus proyectos.

En ese sentido podríamos decir de forma simplista, que Crímenes del futuro es Crash (también de Cronenberg) pero que en lugar de choques de autos como objeto fetiche para la excitación, son las operaciones. Pero este proyecto nos propone bastante más, pero a un nivel filosófico y humanista. Y acá es cuando llega el que para algunos (para quien les habla no) es el gran problema del proyecto.

Muchos pueden acusar a la cinta de que no pasa nada, que es un proyecto pretencioso y blablablá. Pero en realidad los problemas que plantea son los que dijimos más arriba; habla bastante de nosotros como sociedad, mientras filosofea sobre que es ético o no a la hora de que hacer con el cuerpo humano. Y si a esto les sumamos unas actuaciones de primer nivel, menos cosas para quejarnos-

Destacamos en especial a Viggo Mortensen, quien no solo muestra el dolor corporal que sufre a la hora de desarrollar los nuevos órganos, sino también su excitación con cada nueva operación, y al mismo tiempo el no lugar al que lo ponen como pionero de la nueva forma de vivir que hay en ese mundo. Gran trabajo del actor adoptado por Argentina.

En conclusión, Crímenes del futuro es una película que no va a dejar indiferente a nadie. Incomoda de ver, pero a la vez perturbadoramente atrayente, se posiciona como una de esas cintas distintas que es necesario ver en el panorama del cine actual.

 

8/10

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