Si hay un género cinematográfico en decadencia, ese es el western y la remake de Los Siete Magníficos no parece ser la excepción.
Traer a una nueva generación una vieja historia, que a la vez es una adaptación estadounidense de Los siete samuráis de Akira Kurosawa, como si de una leyenda se tratara puede traer consecuencias inesperadas. En primer lugar, la audiencia va cambiando (tengan en cuenta que la película original se estrenó en 1960). En segundo lugar, las propuestas en cuanto a historias de aventuras y acción se fueron aggiornando tanto a los tiempos que corren como al consumo del público. Sin embargo, la recepción es quien tiene la última palabra.
¿El argumento? Es el siguiente: 1879. En el Salvaje Oeste, un magnate (Peter Sarsgaard) que desea apropiarse de una mina de oro amenaza a los residentes de un pueblo llamado Rose Creek. Desesperados, estos recurren al cazarrecompensas Sam Chisolm (Denzel Washington), quien recluta a siete expertos mercenarios para enfrentarse al potentado y a sus terribles secuaces. A medida que van identificándose con la causa de los pueblerinos, los pistoleros de Chisolm acaban peleando ya no solo por el dinero que se les ha prometido, sino por una causa más noble.
Yendo a los detalles técnicos, el film de Antoine Fuqua plasma visualmente una atmósfera clásica de este tipo de historia donde ahora los paisajes pasan a un segundo plano para darle protagonismo a los actores y al centro de la acción: el pueblo castigado. Escrito entre Richard Wenk y Nic Pizzolatto nos presentan a los personajes, de manera lineal y ordenada, mediante una estructura coral con la particularidad de tener como idiomas oficiales el inglés y el comanche, debido a que uno de ellos es indio-estadounidense. En cuanto a la fotografía de Mauro Fiore, opta por la elección de tonos cálidos con un leve viraje al verde y planos generalmente cerrados para mantener la atención todo el tiempo (cuyo montaje de John Refoua es el encargado de marcar un determinado ritmo). Sin embargo, el vestuario corre a cargo de Sharen Davis, ofreciendo una gama de colores oscuros y neutros, acorde a la trama. Acompañado por el score de James Horner y Simon Franglen, donde timbales, coros e instrumentos de cuerdas y viento mantienen un halo de misterio, aventura, drama, con alma de esperanza (sin olvidarnos de los clásicos acordes de Elmer Bernstein al escuchar los primeros compases). Y por último, pero no por eso menos importante, se destacan las actuaciones, además de los ya mencionados, de Chris Pratt, Ethan Hawke, Matt Bomer, Lee Byung-hun, Martin Sensmeier, Haley Bennett, Cam Gigandet, Vincent D’Onofrio, Manuel Garcia-Rulfo, Luke Grimes, Mark Ashworth y Walker Babington.
Si te interesa, esta cinta de 133 minutos estrenada originalmente en 2016, se encuentra disponible en las plataformas de Amazon Prime Video, Flow y Apple TV.
7/10